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17,10 €Jeanette Winterson es capaz de transformar Venecia en una ciudad nueva, hecha de palabras y luz.
Su abundante y extraordinaria producción literaria ha convertido a Jeanette Winterson en una de las voces más prestigiosas de la literatura anglosajona contemporánea. Nacida en Manchester, la autora creció en un entorno donde escaseaban los libros y abundaba el fervor religioso. A los dieciséis años abandonó su casa para estudiar en Oxford y vivir su primera aventura de amor con una chica. A los veinticuatro años publicó su primera novela, titulada Fruta prohibida. En 1986 apareció La pasión, a la que siguieron Espejismos (1989), Escrito en el cuerpo (1992), Art & Lies (1994), el libro de ensayos Art Objects (1995), El powerbook (2000) y en 2004 La niña del faro, la novela con que Lumen inauguró una biblioteca dedicada a las obras más destacadas de Jeanette Winterson, una autora que muchos consideran la digna heredera de Virginia Woolf.
Estamos en Venecia y corren los años en que Napoleón arrasa Europa con sus ejércitos. Henri, un joven cocinero al servicio del general, se enamora perdidamente de Villanelle, una hermosísima criatura de pelo rojizo y pies deformes, que conoce como nadie los secretos de las góndolas y de las salas de juego donde los nobles del lugar apuestan su fortuna entre sonrisas y frases galantes... Esa, que podría ser la trama de una novela histórica al uso, en manos de Jeanette Winterson se convierte en un material precioso, capaz de transformar Venecia en una ciudad nueva, hecha de palabras y luz. En ese lugar, donde la emoción es tan viva como el agua, los jóvenes enamorados aprenden a desgranar su pasión por vías insólitas y arriesgadas que ponen en tela de juicio lo que creíamos saber del sexo y del amor. Publicada en 1986, esta fue la novela que consagró a Winterson como una de las autoras más originales del panorama narrativo de nuestro tiempo. «La pasión no habla de la Historia con mayúsculas; tampoco es una novela romántica... Lo que quise fue hablar de un mundo peculiar que sirviera de espejo secreto para perfilar y multiplicar las posibilidades de nuestro propio mundo. Basta con mirarse en este espejo, y ahí estamos, ubicados en otro tiempo y otro lugar, y con otra vida entre manos.» Jeanette Winterson